XOÁN A LEICEAGA BALTAR
ALUCINACIÓN
... te estremezco y ensalzo...
Mis ojos son tus pezones de caoba,
mecha de la vela
que me deslumbra.
Huelo, gracias a tu piel de palo santo,
lienzo sobre el que se extiende el óleo
que me rezumas.
Saboreo, gracias a tu boca de cereza,
cuyo jugo relamo mientras me relames,
entre descargas eléctricas,
ésas que nunca sentiste
antes de llegar a mí.