GEORGINA CUARTAS
DESAMOR
La noche está tan dócil y callada
no rumora, ni el viento, ni la brisa,
se ha dormido el agua en la cascada
la linfa se ha mostrado tan remisa.
La sangre se ha helado entre mis venas
y ya ha muerto, en mis labios la sonrisa
y la esperanza se volvió indecisa
al sentir tus caricias tan ajenas.
Ya el desamor mostró rojos matices
y la nostalgia hecho hondas raíces,
cual si fuesen los látigos del alma.
y ya está ebrio mi corazón herido
y no entiende la razón, ni el sentido
porque ya se perdió toda calma.