AUGUSTO ENRIQUE RUFINO
REGRESO
No era el fin…
Todavía…
Debí regresar
Con las rodillas dobladas
Arrastrando maletas
de fracasos y heridas
Para re-encontrarme
Ya no existía
La lluvia
danzando cristalina
Ni la rosa
con su perfume esperanzador
Ni el sol
asomando en el alba
su presagio de vida
Debí re-encontrarme
En mi lecho de niño
En mis calles de lapachos y azahares
Para encontrarte…
Volver a soñar auroras
y noches alucinantes
para fundar nuestro paisaje.
No era el fin…
Todavía…